martes, 9 de noviembre de 2021

CAPILLA DE CHAPINGO PINTADA POR DIEGO RIVERA, EL LIBRO. XLVI

 

Ya el lunes me sentía más repuesto de ánimo llegué muy temprano, pregunté si estaba desocupada la sala de juntas, me dijeron que sí. Monté mi pantalla para las diapositivas, en fin, porque pues yo pensé que me tocaba a mí ya todos habrían pasado. Hablé con Pachita me dijo que estaba muy molesto el Director del Patronato porque no había ido el viernes a las siete de la noche, le dije que me sentía muy mal que me dieran por muerto y que por eso no había podido ir   y Pachita se sonreía porque si estaba enterada de todo lo que había pasado y me propuse hacerme pato, total que puede pasar. Se comunicó el yucateco fabuloso, porque daba clases temprano en el Departamento de Suelos, le dijo Pachita, así como en voz baja para que no la escuchara: Aquí está el contador, lo está esperando, y le dijo: Dígale que no se vaya a ir.  Pero usted tiene varias citas. Por eso, que no se vaya a ir. Allí ya me las olí que me iba a dejar haciendo antesala todo el día, lo que se llama torearme.

Y para uno que madruga uno que no duerme ¿Verdad? Bueno entonces le hable a mi secretaria que era muy buena persona. Me la llevaba a trabajar a todas las empresas a que me acompañara y si se hacía muy tarde la llevaba a comer y si se hacía más tarde, la llevaba a su casa que estaba allí en la unidad habitacional del ISSSTE y no sean cochambrosos de la mente mi secretaria casi tenía setenta años, todos estaban pensando que me llevaba a otro lado y no, puro trabajo.

Le dije: Voy a esperar aquí al maestro.  Muy bien. Tráigame lo que tenga para firma aquí pongo una mesita y hacemos una sucursal de mi oficina, vaya trayéndome cosas de a poquito, para que no se vaya a espantar, pero sobre todo la firma de cheques.

Así lo hago contador.

Oiga Pachita ¿No hay una mesa por allí que me pueda prestar? Así chiquita ¿Que me pueda servir?

Si contador.

¿Me la puede prestar?

Si pero no sé cómo le vaya caer esto al maestro.

No, no, bueno, si usted piensa que es mala idea mejor no, es nada más para escribir unos cheques allí, hombre.

Bueno, está bien contador.

 Y me empezaron a traer de cada empresa para aprobar remisiones, revisión de datos y todo lo que hace una empresa que está en movimiento.

El Dueño Del Dique

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