miércoles, 14 de octubre de 2015

LA LEYENDA DE HAPY DAYS, HAPPY BIRTHDAY Y EL SUPER ENEMIGO CACHORROS (XIV)


Esa fue una semana gloriosa, le habíamos ganado a Happy Days y habíamos eliminado a  Bucaneros, increíble, hay que escribirla para Hollywood esta, un partido después jugaba Happy Days con un equipo bueno, para llegar allí bueno pero era el número  siete, a Cachorros le tocaba el mas fregadito uno contra ocho, se esperaba que los primeros cuatro pasaran fácil, pero ya habíamos pasado nosotros que éramos el seis, era algo increíble.
Fuimos por naranjas al salón, las trajimos cortadas en cuatro gajos y en hielo para darle a los chicos en el entretiempo o cuando nos pidieran para hacerle de seconds allí, ellos eran profesionales, su bandeja con hielo, agua, todo tenían, vendas, mertiolate, curitas, etc. llego corriendo, para atenderlos y empieza ganado Happy Days en medio tiempo iban ganado por cinco y si se daban los resultados nos tocaría  enfrentarlos a ellos y ahorita estábamos de sus criados, no importa, no importa, eso era humildad. En cuanto salían de cambio les dábamos masajes, había risa por todos lados, la mazorca de los dientes por todos lados, las novias les daban sus besos y empieza el segundo tiempo y digo voy al baño, ok. No te tardes.
Fui al baño me encontré a un amigo por allí y estábamos platicando, le pedí una tarea, ¡Uf! le digo me voy porque va a acabar el partido y hay que ir a felicitar el equipo.
Cuando llego había una desesperación, todos corriendo para todos lados por toda la cancha ¿Que pasó? estaban como alucinados, cálmense, iba perdiendo por cinco canastas Happy Days y faltaba un minuto y los contrincantes  haciéndose los locos, dándose pases para consumir el tiempo. Llegó el momento de faulear ¡Pun! manotazo falta para tener la pelota lo más pronto posible. La teoría es que ellos van a fallar un tiro y nosotros anotamos de a dos así que se acorta la distancia, y si por allí pierden una pelota hay oportunidad de alcanzarlos, fallaban los tiros, Happy Days anotaba de a dos y estaban muy cerca, a un punto al final.
Gana la pelota Happy Days y se ve la intención luego luego de tirar de donde sea, yo le gritaba acércate más acércate mas, cede la pelota, había uno libre más cerca, se tuvo la confianza el zurdo, era buen tirador y la falló y todo el mundo  a intentar recuperar  la pelota pero los contrarios eran muy rápidos y se pasaban la pelota de un lado a otro para evitar la falta.
Pitó el árbitro y muchos entraron a la cancha, estaba de no creerse, le ganaron por un punto a un súper equipo.
El dueño del dique

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martes, 13 de octubre de 2015

LA LEYENDA DE HAPY DAYS, HAPPY BIRTHDAY Y EL SUPER ENEMIGO CACHORROS (XIII)


Nos volteamos a ver, nos perdimos todos, estábamos tan preocupados por defender y contener que no contábamos nuestros encestes, teníamos que llegar empatados a ese momento que era el plan de nosotros no de Happy Days íbamos ganado y  faltaban cinco minutos y a partir de allí el plan era arriesgar no contener. Nos reunimos y decía el centro: Ya tenemos la ventaja, vamos a  contener y luego atacamos, anotan y anotamos y no dejamos que nos alcancen. Cuando dejas que una voz se alce y todos la sigan es difícil de apagar, rápido dije ¡No!, me voltearon ver y dije ¡No! nuestro plan era arriesgar y vamos a arriesgar. Pero tenemos la ventaja, hay que aguantar. No,  vamos a arriesgar estamos listos, estamos preparados para arriesgar, ya sabíamos que llegando aquí nos tocaba arriesgar, vamos a  ganar por mas, ya no tienen a su líder. Si  nos vamos encima de ellos les vamos a anotar, los vamos a arrollar. Mejor no, aguantemos. No, vamos a arriesgar, ¿Cuando vamos a volver a estar en esta posición para eliminar a un grande? Ellos están esperando que nos vayamos para atrás, vamos a sorprenderlos vamos a anotar vamos por ellos, el todo por el todo.  ¡Sale!

Me vieron convencido de lo que les estaba diciendo: Si nos echamos para atrás vamos a perder, cada pase que demos bien es un pase que evitamos de ellos, cada tiro que hagamos seguro es  una canasta que ellos no anotan, vamos a avanzar.

Ese fue el último grito de Happy Birthday en el partido, Happy Days nos hacía con las manos que aguantáramos, yo les decía vamos, me querían sacar y el que iba a entrar en mi lugar dijo no, que jueguen ellos. Entro por un costado solo y no hay nadie que me marque preparo mi tiro y dije aquí la tengo que anotar, cuando veo que Loranca entra solo por el centro de la cancha y se la aviento a él, hay máximas que te sirven mucho en el deporte no tira el mejor sino el que está en la mejor posición y Loranca estaba a dos metros, voltea y los masacra, se apoya en el tablero y canasta. Allí se entendió el mensaje no me voy a lucir yo va a ganar este partido el equipo. Todos dábamos el pase seguro, rebotábamos, regresábamos con rapidez, todo pasaba en cámara lenta, las voces se escuchaban lejanas y sin sentido, como rumores,  hasta que el árbitro pito el final. Estalló la gente, todo Happy Days se metió a la cancha y amigos de Ángeles. Había una invasión de cancha de gente que no conocíamos pero que estaban contentos de ver caer un gigante en manos de un David con un pastel dibujado en la panza. Nos felicitaban, algunas chicas nos abrazaban, nos acariciaban la cabeza llena de sudor, nos daban una bolsa con agua como si hubiéramos cruzado el canal de la mancha.
El dueño del dique

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lunes, 12 de octubre de 2015

LA LEYENDA DE HAPY DAYS, HAPPY BIRTHDAY Y EL SUPER ENEMIGO CACHORROS (XII)


La siguiente semana saltamos a la cancha que era pavimentada, solamente la final se jugaba en  duela. Enfrentábamos a Bucaneros que venían súper confiados porque habían ganado el campeonato de su categoría el fin de semana en una liga dificilísima como la del deportivo Xochimilco. Nosotros a lo nuestro, pases buenos, cortos, tira si estás  bien situado, si no pásala. Hacíamos nuestro tim back o sea  nuestra bolita todos juntos uno, dos, tres, ¡Happy Birthday!, nuestro grito de batalla.

Happy Days nos fue a ver y como eran del mismo salón se hacían la barra, nos daban consejos: márcalo por afuera, estas tirando mal, ponte más de frente,  cosas así que nos ayudaban mucho, no corras al lado de él corre atrás o adelante, el que da el pase tiene que arriesgar, se lo quitas o lo vuela. Cosas así que nos servían mucho, cuando terminó el primer tiempo íbamos perdiendo por una canasta y en Happy Days  estaban contentos se iban con el amigo que mas preferían: Estas bien, le aconsejaba, tienes que entrar mas fuerte, déjate ir. Uno de ellos le empezó a dar masaje  a un ala que se quería acalambrar y le pegaba con el puño en la pantorrilla, vas a llegar al final, le decía, le ponía aceite y a masajear con fuerza: Ahora si vas a dar todo.

Hay que mantener esa diferencia hasta los últimos cinco minutos, nos aconsejaban, hay momentos de arriesgar y momentos de contener. Seguimos jugando y Bucaneros anotó dos canastas seguidas. Me tocó colarme y me hicieron falta,  allí jalamos un poquito más de aire. No sentí pena cuando en vez de tirar desde la línea a la california tire a la tamalera o sea entre las piernas, como novato,   todos risa y risa y metí mi punto, todos estábamos nerviosos, eso nos ayudo a distendernos, estábamos risa y risa y al final el deporte  es diversión es lúdico, es risa. A partir de allí empezamos a presionarlos, me vuelve a tocar una pelota para tirar de un costado y ¡Pum! Adentro, ese tiro lo tenía hecho, paralelo a la línea final, muchas veces pega en el canto del tablero esta vez no, entró seco se oye riquísimo cuando suena la red sin tocar el aro, la siguiente me vuelvo a colocar todo mundo igual y me toca la misma jugada, y la quemé rápido, ya venía un tipo allí a toda velocidad, me hizo un barrilito (se me tiró a los tobillos) que me tumbó, quiubole con este loco y expulsado. Ahora sí, sentimos un tipo de sopor, les quitamos al mejor jugador, quede un poco estropeado pero no importa,  quitarle al líder al otro es una cosa importante. Pidieron un tiempo fuera de Happy Days nos dijeron van ganando. No, vamos abajo. No, van ganado por dos canastas. No, vamos abajo por dos.  Pedimos el marcador al juez y si, íbamos ganando por tres puntos.

El dueño del dique

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sábado, 10 de octubre de 2015

LA LEYENDA DE HAPY DAYS, HAPPY BIRTHDAY Y EL SUPER ENEMIGO CACHORROS (XI)

Empezamos y de esas cosas que la fortuna gira le metimos tres canastas seguidas a Happy Days eso los descontroló creo que llegaron muy confiados en que nos iban a  masacrar, pensaban que sería una carnicería y nos iban a llenar de cuero la red, eso no les ayudó.

Respondieron después metiendo dos canastas, contratamos árbitros  para que fuera lo más parecido a las finales, de repente íbamos arriba, luego ellos, todo el partido fue así, casi todo el partido jugó su equipo de lujo, el que enfrentaba a Cachorros y no podían con nosotros, pelota que conseguíamos la transformábamos en canasta, ese fue el día apoteósico, el día en que le ganamos a Happy Days, no lo podíamos creer nadie ni la Martita que estaba allí seguramente fue a pesarme los zapatos, los tenis a ver cuánto pesaban con mugre y sin mugre y las novias de los chicos que iban confiadas que siempre se hacían trencitas, o preparaban pulseras, o se acicalaban el cabello unas a otras no los podían creer empezaban a  gritarles métele, muévete como anoche, (que eso les dice uno a las mujeres para molestarlas) hasta que terminó el partido, no les ganamos por mucho fueron tres, quizás cinco puntos. No canastas sino puntos.
Cuando terminamos festejamos como si hubiéramos ganado el mundial de básquet y el superbowl  todo junto, ya queríamos ir por la champaña y el pastel, las chicas del pastel y todo. Allí nos dimos cuenta que un equipo chico le puede ganar a uno grande cuando se tiene confianza.
Una de las chicas se nos acercó y nos dijo ¿Saben algo? ¿Qué? Le falta algo a su uniforme, ¿Qué cosa? Ustedes son feliz cumpleaños, les falta un pastel en el uniforme y sacó un marcador grueso  y le pintó a su amigo un pastel en la panza con velitas encendidas, y varias chicas nos pintaron a todo el equipo pasteles, allí reestrenamos el uniforme.

El dueño del dique
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jueves, 8 de octubre de 2015

LA LEYENDA DE HAPY DAYS, HAPPY BIRTHDAY Y EL SUPER ENEMIGO CACHORROS (X)


En el día se empezaban a reunir los alumnos alrededor de las canchas de basquetbol porque iban a ver los mejores partidos, iban chicas  que no conocíamos, algunos que aplaudían al equipo y no eran de nuestros salones. Llegaban corriendo comiéndose una torta, un sándwich o simplemente pepitas (semillas de calabaza tostadas) y se comentaba que el partido iniciaba en segundos y si  había llegado completo el equipo o que si tal jugador estaba lesionado, en fin era un súper ambiente el que rodeaba los partidos, iba gente con sus guitarras a tocar antes y después del partido, les nacía estar allí, algunos profesores se asomaban a ver por qué tanta expectación. Hasta a nosotros nos llamaba la atención tanta gente y apenas si podíamos pasar a la cancha a cambiarnos la ropa.

Los artistas que ya empezaban a descollar en cualquier arte como la música, la poesía, un instrumento, etc. se daban cita para criticar un deporte violento pero al final terminaban gritando y apoyando a algún equipo. Los árbitros eran apretados por  ambas bancas y por el público que como siempre se ponía del lado del más débil.
Me toco enfrentar a Bucaneros con Ángeles  y nos derrotaron, luego lo enfrente con Happy Birthday apenas les ganamos, era un equipo bien entrenado y fuerte y había cuatro que eran familiares entre hermanos, primos y ellos jugaban todo el tiempo inclusive jugaban en el deportivo Xochimilco  en otro equipo los fines de semana, eran fuertes, allí también jugaba Cachorros sábado y domingo juntos, eran ya curtidos, nos agarrábamos con gente semi profesional. Ganarle a bucaneros fue total.
Entramos a las eliminatorias finales ocho equipos, se enfrentan uno contra ocho, dos contra siete, tres contra seis y cuatro contra cinco.
 Nos tocó de nuevo enfrentar a Bucaneros, y allí si pensé que nos iban a arrastrar, en el partido anterior prácticamente habían jugado con su banca, o sea su segundo equipo. Si se piensa que te puedes resbalar antes de las eliminatorias es una cosa, en un partido que puede no interesarte mucho porque no te va a dar mejor lugar en las clasificaciones, pero ya en las eliminatorias donde perder es salir del torneo, pues te van a hacer talco, así que entre resignados y no pedimos un partido de entrenamiento con Happy Days que estaba muy fuerte había quedado segundo iba contra un equipo más o menos cómodo y pensaban en una final contra Cachorros muy complicada y claro nos dijeron que si. Nos motivábamos entre nosotros: Este es un equipo muy bueno,  es un partido de entrenamiento pero hagan de cuenta que estamos jugando contra Bucaneros, podemos ganar o perder pero siempre vamos a patalear, el que nos gane es porque es muy bueno.
El dueño del dique
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