Más tarde me tocó asistir a una
junta en la Tesorería Contraloría, estaban, Juan Manuel Fermoso, Jorge Parca
(cambié el nombre) y yo, ya de noche, Jorge Parca le pidió cigarros a un señor
que estaba en intendencia y decía que ese señor de intendencia era el que
vendía las cosas allí en la Tesorería, cosa que estaba prohibido, pero le tenía
que comprar porque no podía salir desde rectoría al campus a comprar cigarros,
allí explicó porque se habían hecho algunos cambios, no recuerdo si dijo
matizado o retocado pero el resultado era el que se presentó, y viéndome me
dijo: representa el espíritu de lo auditado.
Para el siguiente informe que ya
me sabía el cuentito de que había que darle vueltas y todo esto. Había afuera
del campus universitario, atrás de la barda digamos, fuera de la Universidad,
en una zona de estudiantes, que había ciber café, ahora tienen computadoras, impresoras y
equipos, pero en aquel tiempo tenían
máquinas de escribir que rentaban o una persona que te podría ayudar, entonces
me acerqué a ver el proceso, había una chica que era muy hábil y le dije: ¿oye
tú trabajas aquí? soy estudiante, me dijo, vengo aquí un rato para pues para
ganarme unos centavos, porque yo vengo de fuera y no me alcanza para la renta,
para la comida, para lo que sea.
Perfecto, porque te necesito dos
horas, o tres horas, pero necesito que seas una pared que no te acuerdes de
nada de lo que yo te voy a dictar
y te voy a pagar tu tiempo y un
extra. Está bien, yo no me entero de nada, ni me interesa, no te conozco. Entonces
a la hora de la comida de tres a cinco de la tarde le dictaba los informes de
auditoría a la chica que no entendía nada, así pude pasar informes a máquina
para adelantar tiempos.
Como sea, vamos a ponerlo en blanco y negro, era otra frase que se usaba en auditoría, ponlo en blanco y negro, o sea blanco el papel negro las letras. Así que pedí la cita con Andrés, le lleve las cedulas de auditoría, reviso, preguntó y cuando llegamos a la cosa de que “vamos a ponerlo en blanco y negro”, que eso tardaba fácilmente algunas semanas, le dije a Andrés: yo tengo una máquina de escribir en mi casa porque yo estudié para Secretario un año, soy Secretario ejecutivo B, se me quedaba mirando profundamente, entonces mira aquí está el informe mecanografiado, como se dio cuenta de que me estaba brincando las trancas, me contestó: no lo vuelvas a hacer, es delicado que tengas información de la Universidad afuera.
El Dueño Del Dique
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